Reaparece Maná en Los Angeles con lleno total en el Gibson Anfiteatro

En esta gira la banda ganadora del Grammy a la mejor producción musical en rock en español, tiene previsto actuar en ciudades de Estados Unidos, México, América Latina y Europa.
Los Angeles.- Con lleno absoluto y público de pie durante su concierto de poco más de dos horas, el grupo mexicano Maná tuvo una exitosa reaparición en Los Angeles -luego de tres años de ausencia- en el primero de cuatro conciertos que ofrecerá aquí.
En el umbral de la gira “Amar es combatir”, que incluye 70 ciudades y que inicio el pasado fin de semana en San Diego, Maná mostró nuevamente esta noche su calidad musical con un espectáculo que entretuvo a los más de seis mil asistentes al Gibson Anfiteatro.
El nuevo show del grupo mexicano, nominado a cuatro premios Billboard, contó con nuevos arreglos musicales a sus más sonados éxitos, además de impactantes escenografías, juego de luces y efectos como una cortina de lluvia que separó al público del grupo y que sorprendió a los asistentes.
Este es el show más grande y ambicioso que ha presentado la agrupación, que desde su promoción aseguró que su público quedaría alucinado y, al final fue evidente que los asistentes salieron más que satisfechos.
Al inicio una enorme manta transparente cubrió la totalidad del escenario -mostrando así destellos de lo que sería el espectáculo- y luego sombras que aparentaban escapar de una barda de prisión caían una a otra hasta que fue derrumbada con una explosión apareciendo el grupo.
El tema con el que inició Maná fue “Manda una señal” de su más reciente producción dando pauta a varios temas de este nuevo CD, incluida la más celebrada y cantada por los asistentes “Bendita tu luz” que originalmente interpretan a dueto con Juan Luis Guerra.
Pero eso no hizo mella entre los asistentes quienes corearon la mayoría de las interpretaciones olvidando los casi tres años que la agrupación no se presentaba en esta ciudad, a la que etiquetaron como la capital mundial del rock en español, como lo dijo Fher, el vocalista.
Entre las sorpresas, además de los arreglos musicales, destacaron la interpretación de uno de sus primeros grandes éxitos “¿A dónde jugaran los niños?” portando unas máscaras de calaveras además de iluminación tenue con veladoras dando una imagen fúnebre.
Otra interpretación destacante fue la del tradicional y energético baterista Alex, quien en una base giratoria se mostró más impactante cuando ésta se elevaba mientras el músico parecía estar en trance y lucha con el instrumento.
Los temas más cotizados no pudieron faltar y así siguió en secuencia que provocaba aplausos y gritos desde “Mariposa traicionera”, “Eres mi bendición”, “Cachito”, “Oye cucú papá se fue”, y hasta dos arreglos con rock de José Alfredo Jiménez “Ella” y “El rey” que fueron igualmente celebrados.
No falto la energética “Me vale”, el arreglo rockero a la composición de Juan Gabriel “Se me olvido otra vez”, “Perdido en un barco”, y cuando disponían concluir fueron regresados por un reclamo uniforme reforzado por celulares encendidos que dieron un efecto de luciérnagas.
Antes de despedirse, y de que Maná interpretara “Rayando el sol”, Fher sacó una enorme bandera de México que ondeo sobre el escenario, estando a punto de sufrir un accidente luego de resbalar y caer de rodillas, sin que esto pasará a mayores ya que se levantó de inmediato para seguir con su celebración.
En esta gira la banda ganadora del Grammy a la mejor producción musical en rock en español, tiene previsto actuar en ciudades de Estados Unidos, México, América Latina y Europa.